Taquillazos Veraniegos

Os habréis dado cuenta. No es muy difícil. Igual que el anuncio del calvo, que rodeado de duendes, fantasía, y frases sinsentido nos advierte de la llegada de ese espacio de tiempo plagado de consumismo frenético, reuniones olvidables saturadas de interminables cantidades de bandejas con extraños guisos, frío invernal, canciones prosubnormales y anuncios estilo: “hoy en Antena 3: ¡¡¡Solo en casa 2!!!”, otro espectáculo audiovisual comienza a mostrarnos que vuelve a acercarse la época veraniega del año. Son las películas del verano, en particular sus trailers promocionales los que nos sacan de nuestro empeño de contar hasta el número infinito. Todos los años, fieles a su cita, cual anuncio de “Vacaciones Santillana”, los estrenos de verano llenan nuestras pantallas de televisión de absurdos spots publicitarios derrochantes de tontería y “adrenalina pura y dura”. Este año no iba a ser distinto y ya se han hecho notar en todo su esplendor. Si, eso es, toda esa serie de películas. Ya están aquí. Ni en la parada del autobús te dejan tranquilo. No puedes escuchar la radio sin tropezarte con un par. No podrás evitar que sean nombradas en cualquier tipo de conversación. Durante tres meses cualquier revista/periódico/boletín parroquial estará plagado de imágenes suyas. Es el precio que se debe de pagar por el disfrute extraordinario de sol. Es uno de los inconvenientes de la época. Como las sequías: solo pertenecen a una época del año, pero durante este espacio de tiempo: son devastadoras. Y aquí las tenemos: “Piratas de Caribe 2”, “Misión Imposible 3”, “El Codigo Da Vinci”, “Instinto Basico 2”, “Tirante El Blanco”, “Get Rich or Die Tryin”, son tan solo las primeras de la interminable lista que no cesara hasta que el verano toque a su fin. Otro pedazo de estiércol con el que tenemos que cargar.